Tuesday, December 6, 2016


Amelia Eppard is a senior majoring in Marketing with a concentration in Spanish. She is also a member of the Phi Sigma Iota honor society.  After graduation, she is planning to take a gap year to teach English in Spain, where she will be able to immerse herself in the culture and learn valuable skills (plus enjoy their delectable desserts and coffees).

Amelia wrote this piece about her experiences learning Spanish, and a very young teacher she met while volunteering in a local school.

Gracias, Luis
Por Amelia Eppard

El proceso de aprender un idioma puede ser frustrante, y había veces cuando quería rendirme. Aprender un idioma requiere mucha paciencia, muchas horas de leer, y muchas actividades de verbos. Pero, la satisfacción no está en las clases de español o francés, o italiano. La está en los momentos simples, pequeños, y bonitos en la vida. Para mí, este momento ocurrió con un niño de 6 años. 

Ahora, soy una voluntaria en una escuela de Rhode Island. Muchas de los estudiantes necesitan ayudan con su inglés o su español porque ellos son de familias hispanohablantes. En la clase de primero grado, hay un niño pequeño se llama Luis. Luis no puede hablar inglés y por eso, él es muy tímido y no tiene mucha confianza. Sin embargo, Luis se convirtió en un amigo mío. Cada martes y jueves, cuando yo voy a la escuela, Luis tiene una voz un poco más alta. Cada vez, Luis está más emocionado y quiere mi ayuda. Le he enseñado las matemáticas y le he dicho que “Repita estas palabras en inglés.” Me importa mucha nuestra amistad y antes de esta experiencia, no sabía que un niño de 6 años puede ensenarme en una manera tan especial e imprescindible. 


Luis es mi razón para continuar este viaje a fluidez. El proceso de aprender es gratificante solo si puede usar el conocimiento en una manera impactante. Espero que cada estudiante de un idioma pueda encontrar su propio Luis. Doy muchas gracias a mi maestro pequeño.